Las piernas son las extremidades que se encargan de llevarnos a diferentes lugares, mediante la bipedestación y la caminata. Es por eso que suelen presentar cansancio muscular después de una larga jornada de trabajo, ejercicio físico o por simplemente permanecer tiempo de pie. Así mismo, ocurre con las caderas que su función es unir el tronco con las piernas, lo que le confiere la función de participar también en los movimientos de los miembros inferiores. Entonces, debido a que son zonas sensibles se ha diseñado una categoría para el automasaje de las mismas.
Bienvenido a la sección de vídeos sobre el Automasaje para la pelvis, cadera y pierna.
Todas las partes que componen al cuerpo son importantes para el ser humano, sin embargo zonas como las piernas y las caderas son las que se encargan del movimiento necesario para la bipedestación, marcha, correr, brincar y todas aquellas actividades que requieren el uso de las piernas. Debido a la implicación que estas zonas tienen con la vida cotidiana es que suelen presentar cansancio muscular, tensión e incluso son propensas a sufrir de lesiones articulares, musculares y óseas.
Ya sabemos la función de estas regiones del cuerpo y la razón de porque se lesionan, pero vale la pena destacar cuales son aquellas lesiones que más alteran la funcionalidad de la pelvis y de los miembros inferiores y de las cuales se explicarán los ejercicios de automasajes:
Además de la lesiones mencionadas, también podrás encontrar vídeos explicativos de automasajes para tratar la tendinitis de la fascia lata, rotura fibrilar de los gemelos, tensión de ls musculatura del periné y técnicas de liberación miofascial.
Los masajes en general crean vasodilatación y de la misma manera aumento de la circulación, temperatura y enrojecimiento local temporal. Gracias a lo anterior, se produce alivio del dolor, disminuye la tensión de los músculos previniendo la aparición de contracturas, se experimenta relajación, disminuye el estrés y todo conlleva a un bienestar físico acompañado de bienestar emocional por no poseer ningún síntoma negativo y por desaparecer lo que tanto nos incomodaba.
Además de las manos que serán nuestras principales herramientas para realizar masajes, también podemos utilizar rodillos, palos de madera, pelotas con distintas texturas e incluso se puede utilizar hielo en cubos.
Empieza por el maravilloso automasaje para los glúteos y piramidal en el que además trabajarás todos los pelvitrocantéreos e incluso en la zona lateral, el músculo tensor de la fascia lata. Esta maniobra te hará sentir ya una gran relajación en las cadera pero también en todas las piernas.
Continua por un automasaje del psoas ilíaco que te ayudará a relajar la ingle y por su conexión con el diafragma hasta la respiración.
Masajea tus cuádriceps e isquiotibiales con tus manos y pasa a hacerte un masaje con rodillo para los músculos gemelos y sóleo. Termina con un magnífico automasaje para los pies con pelota que redondeará este trabajo y te dejará una sensación de bienestar y relajación en pies, piernas y cadera muy placentera y agradable.