El dolor, ardor y hormigueo en las piernas, puede originarse debido a una estenosis foraminal o estrechamiento del agujero de conjunción. Esta afección vertebral puede ocasionar otros síntomas y molestias, de los cuáles hablaremos en el presente artículo. Además, te brindaremos información detallada sobre los factores causales que pueden promover su aparición y que abordajes terapéuticos están disponibles desde la medicina y la fisioterapia para tratar la estenosis foraminal:
El término estenosis proviene del griego “στένωσις-stenosis” y es usado en medicina para hacer referencia a un proceso de constricción o estrechamiento de algún canal o conducto corporal. En el caso de la estenosis foraminal, dicho estrechamiento patológico se presenta en el espacio foraminal o foramen intervertebral. Aunque puede presentarse en la columna cervical, es más frecuente en la región lumbar, siendo una causa frecuentemente relacionada al dolor lumbar.
La composición anatómica del raquis es bastante compleja para poder cumplir con los requerimientos mecánicos que permiten la ejecución del movimiento. Por lo que además de los cuerpos vertebrales y los discos intervertebrales que la mayoría conoce, la columna vertebral dispone de abertura o canal intervertebral que se encuentra a cada lado de un cuerpo vertebral, a través de este espacio salen los nervios espinales, que en el caso de la columna espinal lumbar son aquellos que se encargan del intercambio de información entre el cerebro y los miembros inferiores. Esta apertura se le conoce como el foramen intervertebral o espacio foraminal. En el caso de una estenosis foraminal, el diámetro interno del foramen intervertebral se reduce considerablemente debido a diferentes procesos patológicos, lo que conduce a una compresión irritación de la raíz nerviosa que discurre por su espacio, afectando su funcionamiento. Este estrechamiento o estenosis en la región lumbar se puede desarrollar en un lado o en ambos, siendo el lado comprimido víctima de síntomas de tipo neurológico como: parestesias (hormigueo, falta de sensibilidad), dolor con ardor, disminución de la fuerza entre otras molestias en una o ambas piernas.
El estrechamiento del foramen intervertebral también es conocido como compromiso del neuroforamen, en el siguiente vídeo te mostraremos de manera más gráfica de que trata esta afección vertebral (frecuente en la región cervical y lumbar) y como este estrechamiento puede acarrear importantes complicaciones y alteraciones para quien lo padece:
Actualmente la incidencia y prevalencia de la estenosis foraminal no está del todo establecida, ya que los datos que se manejan es de aquellas personas que han pasado por diagnósticos por imagen y por el número de pacientes que se somete a una cirugía para resolver dicho diagnóstico. En los Estados Unidos se considera un diagnóstico común y es una de las causas de dolor lumbar o lumbociático en personas mayores de 65 años, se estima que en ese país 1 de cada 1000 habitantes con este rango de edad han sido intervenidos quirúrgicamente para resolver esta afección.
#Dolor #Lumbar tiene muchas causas: #HerniaDiscal, #SindromeDelPiriforme, #EstenosisForaminal y otros. #TipsKinenova pic.twitter.com/KmphIp65J8
— Kinenova (@Kinenova) April 6, 2015
La reducción del diámetro del neuroforamen puede ocurrir por diversos factores causales, el más común es el desgaste o la degeneración de la columna. Con el tiempo, los discos intervertebrales lumbares se deshidratan y pierden líquido, lo que los vuelve más planos y menos capaces de absorber la presión y las fuerzas relacionadas con el movimiento, por lo cual cuando ocurren ciertas situaciones que lo exponen a un mayor estrés (malas posturas, sobre entrenamiento, traumatismos) conducen a la protrusión o herniación lateral del disco, el cual comprime los nervios que pasan por el canal foraminal.
La reducción del diámetro del neuroforamen puede ocurrir por diversos factores causales, siendo el más común es el desgaste o la degeneración de la columna.
Unos músculos lumbares bien entrenados, estabilizan lo columna lumbar, por lo que no es de extrañar que el desbalance de los músculos lumbares pueda ocasionar una columna inestable, que promueva la degeneración de las articulaciones interapofisarias, las cuales constituyen la parte posterior del foramen intervertebral. El desbalance muscular puede promover la aparición de procesos degenerativos como la artrosis y la hipertrofia de las articulaciones interapofisarias que reducen el espacio por donde salen las raíces nerviosas lumbares. Además, cuando los músculos lumbares no pueden estabilizar bien la columna lumbar, el cuerpo forma nuevas estructuras óseas para estabilizar el área (espolones óseos y osteofitos), lo que también puede reducir el diámetro del neuroforamen. En resumen, podemos decir que las causas relacionadas a la estenosis foraminal son:
Si bien la estenosis foraminal puede ocurrir a nivel cervical, es más frecuente en la región lumbar. Si este último es el caso, la persona afectada puede presentar dolor lumbar, que puede variar según la gravedad de la enfermedad, la postura y la extensión del movimiento o estrés físico. Si se trata de un estrechamiento ya avanzado, la persona puede presentar los siguientes signos y síntomas:
Al tratarse de una afección que comprime alguna raíz nerviosa lumbar, frecuentemente se desarrollan déficit o trastornos neurológicos en determinadas áreas de la pierna, relacionadas a las regiones de inervación del nervio comprimido. La estenosis foraminal afecta principalmente a los dermatomas (región de piel irrigada por un nervio) y músculos de las raíces L4 y L5, ocasionando síntomas como:
Es muy poco frecuente, pero la estenosis o estrechamiento puede conducir al llamado síndrome de cauda equina, cuyos principales síntomas son la pérdida de la movilidad de ambas piernas y problemas con las deposiciones (incontinencia fecal) y la micción (incontinencia urinaria).
De manera directa no es posible prevenir esta afección vertebral, sin embargo, si tenemos en cuenta que la inestabilidad lumbar es uno de los factores que fomenta su aparición, el entrenamiento de esta área podría resultar útil para mantener la salud de la columna vertebral y reducir el riesgo de una estenosis foraminal. Siendo así, las acciones enfocadas a mantener la salud de la espalda son:
La resonancia magnética de la columna lumbar es el método de diagnóstico de primera elección para los profesionales de salud. Ya que esta muestra con exactitud si existe la presencia de una herniación lateral, artrosis o hipertrofia de las articulaciones interapofisarias, situaciones que conducen a un estrechamiento del diámetro del neuroforamen. A pesar de que la resonancia magnética (RM) provee de un diagnóstico certero, es necesario para el especialista llevar a cabo un registro de las molestias, síntomas y enfermedades previas y actuales, incluidas las operaciones anteriores a través de la anamnesis. Además, se lleva a cabo un examen físico con la finalidad de detectar las anomalías y alteraciones funcionales ocasionadas por la afección, para ello se realizarán:
Generalmente los síntomas y molestias que ocasionan esta afección, suelen resolverse mediante el tratamiento conservador, permitiendo mejorar la calidad de vida del paciente afectado por la estenosis, por lo cual muchos médicos lo consideran como la primera opción terapéutica, dejando la cirugía como última opción terapéutica o para los casos más graves. El abordaje conservador está conformado por la indicación de fisioterapia, medidas ortopédicas como corsé o fajas lumbares, así como la colocación constante de calor en la región más baja de la espalda, y el uso de medicamentos que variarán dependiendo del síntoma que presente el paciente con estenosis foraminal:
Frecuentemente el médico indica los medicamentos anteriormente mencionados en forma de
tabletas, cápsulas o grageas. Sin embargo, en algunos casos se puede también indicar inyecciones directas al área afectada del canal. Esta modalidad terapéutica la suelen indicar algunos médicos en caso de que la raíz nerviosa este severamente inflamada.
La terapia conservadora ayuda a casi todos los pacientes con esta estenosis, por lo cual la cirugía rara vez es necesaria o requerida. La cirugía se convierte en una opción si el tratamiento conservador falla o si el paciente tiene un alto nivel de sufrimiento y está significativamente restringido funcionalmente en su vida cotidiana. El procedimiento quirúrgico siempre tiene como objetivo aliviar la región en donde este el estrechamiento o la estenosis. Con ese propósito, en la actualidad existen varios métodos quirúrgicos, tales como:
En este caso el objetivo principal de la fisioterapia es el tratamiento del dolor presente, ya que, si no se logra la analgesia del dolor, esto conduce a una intensificación de la estenosis foraminal debido a un aumento reflejo en la tensión muscular lumbar. Romper este ciclo de dolor es primordial para el éxito del tratamiento fisioterapéutico. Teniendo esto en cuenta podemos dividir el tratamiento de fisioterapia en dos fases:
Como ya hemos destacado la analgesia del dolor es primordial, con ese propósito se realizan intervenciones tanto activas como pasivas, tales como:
Una vez la dolencia haya disminuido, se da inicio a intervenciones que impliquen la incentivación del movimiento de manera progresiva, con ese propósito se realizan intervenciones más activas, tales como:
Ya en esta fase el paciente no presenta dolor y las molestias que previamente le impedían ser funcional en sus actividades de la vida diaria, están reducidos o no están presentes. Es por ello, que las intervenciones fisioterapéuticas están enfocadas en el entrenamiento de las habilidades alteradas por la estenosis (deportivas, laborales, de ocio, etc.), además el fisioterapeuta indica al paciente diversas alternativas de entrenamiento y educación postural para evitar la inestabilidad lumbar y que esta promueva nuevamente el estrechamiento del neuroforamen.
Desde nuestro portal de YouTube FisioOnline, te brindaremos importante información sobre el abordaje terapéutico de variedad de lesiones y alteraciones de la salud, mediante detallados y breves vídeos informativos realizados por profesionales en la fisioterapia y la rehabilitación, quienes te explicarán cómo realizar adecuadamente ejercicios, automasajes, estiramientos y otras alternativas terapéuticas para ponerle fin a tu dolencia lumbar.
El estrechamiento del neuroforamen implica ciertas características que te explicaremos en el vídeo a continuación, con la finalidad de que conozcas más acerca del diagnóstico que te está aquejando y puedas comprender el porqué de los diferentes enfoques terapéuticos:
Esta enfermedad es progresiva por lo que puede seguir empeorando con el tiempo, si no se trata manera temprana. Por lo cuál te recomendamos ver el siguiente vídeo en donde un profesional fisioterapeuta con años de experiencia te brindará las directrices necesarias para que soluciones las molestias relacionados con la estenosis lumbar, mediante la ejecución de variedad de ejercicios:
El estrechamiento y la compresión sobre algún nervio lumbar, puede ser aliviado mediante la ejecución de la técnica de tracción. Aprende a cómo realizar un ejercicio de tracción lumbar en el siguiente vídeo, siempre debemos respetar el dolor en la realización del ejercicio, disminuyendo su intensidad o dejando de hacerlo en caso de que incremente su intensidad:
Siendo las hernias lumbares uno de los factores causales del estrechamiento de los espacios foraminales, te enseñamos a cómo promover la regresión del mismo con ayuda de ejercicios terapéuticos y otros consejos de parte de un profesional fisioterapeuta ortopédico:
Enfermedades degenerativas como la artrosis pueden conducir a la reducción del neuroforamen, por lo que te mostramos en el siguiente vídeo cómo ralentizar sus efectos degenerativos mediante ejercicios, automasajes y estiramientos de la región lumbar:
Dependiendo de la causa, la estenosis puede progresar muy lentamente o de otra manera muy diferente. El dolor causado por la compresión sobre las vías nerviosas puede permanecer constante, disminuir con ciertos movimientos o con el tiempo, o ir y venir constantemente sin tratamiento. Algunas veces los síntomas disminuyen con la edad, ya que es cuando la columna se vuelve menos móvil y debido a que los nervios se irritan con menos frecuencia, las molestias relacionadas con el movimiento ocurren con menos frecuencia.
En general, esta afección espinal puede tratarse bien en la mayoría de los casos con métodos de terapia conservadores cómo la fisioterapia, de modo que los afectados puedan vivir relativamente libres de molestias y síntomas, consiguiendo así la obtención de bienestar y la mejora de la calidad de vida del paciente afectado. Si bien, los óptimos resultados obtenidos (sean por tratamiento conservador o quirúrgico) puede darse a corto plazo (semanas o meses), que los mismos perduren sólo depende de que el paciente mantenga un estilo de vida activo, enfocado en la salud de su espalda.