Nuestras articulaciones cuentan disponen de pequeñas bolsas llamadas “bursas” las cuales permiten minimizar la fricción entre el tejido blando sobre el tejido óseo que ocurre durante el movimiento. La cadera también posee varias bursas, que pueden verse afectadas por los movimientos repetitivos y el sobreuso de la cadera, conduciendo a la Bursitis trocantérea o Trocanteritis. Conoce más acerca de esta afección frecuente en deportistas a continuación:
Varios grupos musculares están anclados al trocánter mayor a través de tendones, principalmente el glúteo medio y el glúteo menor. Para absorber las fuerzas resultantes de los cambios de posición del muslo, la articulación de la cadera tiene variedad de bursas. Cuando se inflama la bursa ubicada en el trocánter mayor se le denomina bursitis trocantérea. Este proceso inflamatorio es la causa más frecuente de dolor lateral de cadera, que en ocasiones puede irradiarse hacia la parte baja del muslo y la rodilla. Estos síntomas de la bursitis en la cadera generalmente aumentan significativamente bajo estrés.
Observa en la siguiente infografía la ubicación de las bursas afectadas por esta patología inflamatoria y cuáles son las estructuras anatómicas involucradas en dicho proceso patológico:
El dolor de cadera es una causa frecuente de consulta médica, se estima que la prevalencia que presenta esta afección es del 15,0% y el 8,5% en mujeres, y del 6,6% y el 1,9% en hombres, por lo cual las mujeres presentan más frecuentemente hinchazón de la bursa trocantérea. Esta afección generalmente aparece a partir de los 20 – 40 años, y afectan particularmente a los atletas corredores de larga distancia, porteros de fútbol y en aquellos deportistas que están expuestos a altos grados de tensión en la cadera debido a su actividad deportiva.
Trocanteritis, una enfermedad muy común que afecta especialmente a las mujeres mayores@SERAM_RX https://t.co/E3OtIAD8Pr
— 65ymas (@65ymuchomas) January 23, 2020
Con cada movimiento, los tendones y los músculos se deslizan uno sobre el otro, las bursas en el medio actúan como pequeños amortiguadores. Tan pronto como estos movimientos de deslizamiento se vean alterados o se presenta una lesión aguda en la zona, el equilibrio de este sistema se interrumpe y pueden ocurrir cambios inflamatorios en la bursa acompañados de dolor. La alteración de este equilibrio, se debe frecuentemente a situaciones que pongan en sobrecarga mecánica a los ligamentos, tendones y músculos en la articulación de la cadera, tales como:
Además, ciertas enfermedades y alteraciones subyacentes como las deformidades en la articulación coxofemoral y la rodilla, la artritis reumatoide o la gota también pueden promover la hinchazón de la bursa trocantérea.
Los pacientes que padecen de una trocanteritis por inflamación de la bursa trocantérea suelen referir dolor lateral de cadera que se intensifica al mover la cadera, levantarse de una silla y al descargar peso sobre la pierna. En algunos casos este dolor es difuso (puede irradiarse a la rodilla o las nalgas), mientras que otros casos se presenta muy localizado, punzante e intenso sobre la bursa afectada. La inflamación de la bursa en la articulación de la cadera suele ir acompañada de enrojecimiento e hinchazón visibles desde el exterior. En resumen, los signos y síntomas de la inflamación de la bursa trocantérea son:
En la mayoría de los casos, es posible prevenir esta afección mediante acciones que reduzcan el estrés sobre las bursas laterales de la cadera, las más recomendadas son las siguientes:
No solo la trocanteritis puede causar dolor unilateral en la cadera al acostarse de lado o al caminar, hay varias lesiones que pueden desencadenar estos síntomas. Las más destacables son:
En la valoración diagnóstica el médico o fisioterapeuta inspecciona las áreas dolorosas, en caso de estar presente esta afección, las áreas sensibles a la presión se encuentran por encima de una protuberancia lateral en la cadera (trocánter mayor). Además, el especialista realiza un examen físico detallado para valorar: amplitud articular, fuerza muscular y la marcha.
La información obtenida no solo sirve para confirmar el diagnóstico, sino también para lograr diseñar un plan terapéutico adecuado para el caso.
El dolor lateral en la cadera cuando se separa la pierna extendida (movimiento de abducción) es otro hallazgo común en un diagnostico positivo. Sin embargo, sólo puede confirmarse mediante estudios de imagen como la ecografía/ultrasonido y la resonancia magnética, los cuáles evidencian el engrosamiento y la hinchazón de la bursa, así como calcificaciones. Una radiografía podría resultar útil en casos avanzados, ya que muestran si se han formado calcificaciones en las adyacencias de la bursa.
En el tratamiento médico el alivio de la bursa irritada es lo primero, por ello la primera indicación del médico es el reposo de la articulación coxofemoral, el reposo no significa inmovilización, sino la pausa de las actividades deportivas o estresantes (durante al menos 4 semanas). Además, indica el uso de fármacos con efectos antiinflamatorios y analgésicos como el ibuprofeno, combinado con fisioterapia y terapia de ondas de choque para acelerar la regeneración de la estructura inflamada. Cuando el dolor ha disminuido, la persona afectada puede comenzar actividades deportivas de baja intensidad de manera progresiva, hasta alcanzar su anterior capacidad funcional, esto con ayuda y la supervisión de fisioterapeutas.
Si a pesar de estas intervenciones terapéuticas los síntomas no desaparecen, el médico puede perforar las bursas afectada con una jeringa y a través de ella inyectar fármacos antiinflamatorios (frecuentemente cortisona o corticosteroides).
Son muy pocos los casos que son tratados con cirugía, ya que esta afección suele resolverse mediante tratamientos conservadores. Sin embargo, sí hay daños tisulares importantes y los síntomas no desaparecen con las intervenciones anteriormente mencionadas, la cirugía puede ser inevitable. En este procedimiento el cirujano repara el problema subyacente y elimina la bolsa inflamada (bursectomía). Algunos médicos prefieren durante este procedimiento quirúrgico extirpar una parte del tendón que roza el trocánter mayor, mientras que otros prefieren alargar el tendón quirúrgicamente.
La fisioterapia ofrece notables resultados en cuanto a la reducción del dolor y la inflamación de los pacientes diagnosticados con esta afección. Teniendo en cuenta que las causas que originan este malestar mayormente son biomecánicas (alteraciones articulares y musculares), el fisioterapeuta se encarga de devolver a la articulación de la cadera el equilibrio de fuerzas, evitando así un mayor roce sobre el trocánter mayor del fémur. Para lograr este propósito la fisioterapia dispone de variedad de modalidades terapéuticas tanto activas como pasivas, que permiten aliviar el dolor, reducir la hinchazón, mejorar la flexibilidad y fortalecer los músculos de la cadera. Las distintas modalidades terapéuticas suelen ser aplicadas por fases, una vez alcanzados los objetivos de una fase, se procede a realizar las intervenciones de la fase siguiente y así sucesivamente.
Aquí el objetivo principal es la resolución del dolor agudo y la inflamación presente en la cadera, para ello se llevan intervenciones tales como:
Una vez el dolor haya remitido o haya bajado en su intensidad, se procede a realizar intervenciones enfocadas en ganar amplitud articular sin dolor y en recuperar la fuerza muscular y funciones alteradas por el dolor. En esta fase el fisioterapeuta prescribe:
Ya en esta fase el paciente no refiere dolor durante movimiento que impliquen fuerza y amplitud articular. Es por ello, que el tratamiento se enfoca en la recuperación de todas las funciones presentes previas a la lesión, teniendo en cuenta que esta enfermedad predomina en deportistas, en esta fase el fisioterapeuta trabaja y corrige el gesto deportivo, ya que, si el mismo fuese biomecánicamente adecuado, la trocanteritis no ocurriría. Además, le enseñará al paciente algunas técnicas preventivas que le permita regresar de manera segura a sus antiguas actividades de la vida diaria sin el riesgo de sufrir una recaída.
El tratamiento Fiit Concept – Fisioterapia Integrativa se encuentra basado en las investigaciones realizadas desde la Medicina Tradicional China (Medicina Oriental), este tipo de medicina establece que el desarrollo de una alteración de algún órgano o víscera en es producto de una emoción en concreto, la presencia de esta alteración podrá repercutir negativamente en el tono muscular y en la biomecánica de algunos segmentos intervertebrales, debido a la relación establecida por el sistema simpático y parasimpático. Además, otros factores causales muy importantes, pero poco tomados en cuenta como la nutrición y el mal manejo del estrés también contribuyen a la instauración de una disfunción visceral que finalmente genere alteraciones en el sistema musculoesquelético.
Toda esta relación la podrás ver ejemplificada en el siguiente diagrama:
Una vez establecidas estas relaciones causales, podemos afirmar que los factores físicos o mecánicos comúnmente asociados a la trocanteritis – bursitis trocantérea (malas posturas, trabajos repetitivos, exceso de ejercicio) pueden verse facilitados por la presencia de una disfunción visceral asociada a estrés, alteraciones nutricionales y emocionales.
Desde el punto de vista Fiit Concept – Fisioterapia Integrativa la trocanteritis se origina como consecuencia de la disfunción visceral del riñón, la vejiga, el colon irritable, el intestino delgado o en los órganos sexuales (útero-próstata).
Estos órganos cuando están en disfunción ocasionan bloqueos vertebrales lumbares, especialmente de la 5ª vértebra lumbar, que conduce a un desbalance de la musculatura lumbar y de la pelvis, caracterizado por espasmos y un aumento de la tensión muscular especialmente del músculo piramidal o piriforme, el cual consecuentemente altera la correcta biomecánica de la cadera y ocasiona la irritación de la bursa trocantérea.
Este bloqueo de la quinta vértebra está influenciado por disfunciones viscerales, si la trocanteritis es derecha hay una disfunción del intestino delgado, así como del útero-próstata y si hay trocanteritis izquierda la disfunción es del riñón o por un colon irritable. Estas disfunciones pueden originarse por variados factores que a continuación te explicaré:
Al fin y al cabo, todos estos factores influyen negativamente en el sistema musculoesquelético a nivel lumbar, originando tensión en los músculos lumbares, rigidez en la zona dorsal baja, lumbar alta y pelvis, conduciendo a una zona hipermóvil e inestable que acaba dañando al disco intervertebral lumbar, lo que por ende ocasiona la instauración de una Trocanteritis – Bursitis Trocantérea derecha o izquierda con respuesta refleja ante estas disfunciones viscerales.
En nuestro portal de YouTube FisioOnline, podrás encontrar importante información sobre el abordaje terapéutico de variedad de lesiones y patologías, mediante detallados y breves vídeos informativos realizados por profesionales en fisioterapia y rehabilitación, quienes te explicarán ejercicios, automasajes, estiramientos y otras alternativas terapéuticas para ponerle fin a tu en la cadera.
Antes de iniciar cualquier acción terapéutica para esta afección de la cadera, te recomendamos ver el siguiente vídeo en donde se expondrás de manera breve y detallada tres cosas importantes que se deben tener en cuenta para tener un resultado satisfactoria en el tratamiento de presente problema:
Aunque se trata de una afección frecuente en atletas y deportistas, no se trata de una lesión deportiva en sí. En el siguiente vídeo te proporcionaremos información clave sobre el tratamiento conservador y quirúrgico, que te permitirá seleccionar el abordaje terapéutico adecuado para tu caso:
El ejercicio físico, los estiramientos y las técnicas manuales de automasaje puede ofrecerte maravillosos resultados con respecto al dolor y los síntomas que ocasiona esta afección. Es por ello que te recomendamos ver el siguiente vídeo, en donde se te brindaran las directrices necesarias para realizar cada una de estas técnicas terapéuticas de manera adecuada:
Ya tenemos en claro que esta afección no sólo es provocada por la presencia de alteraciones mecánicas, sino que también puede ser provocada por la disfunción de órganos y vísceras. Es por ello que te recomendamos ver el siguiente vídeo en donde encontraras el tratamiento natural ideal para tratar las disfunciones viscerales que estén ocasionando trocanteritis del lado derecho:
Si por el contrario tu lado afecto es el lado izquierdo, el tratamiento natural cambia, por lo que te recomendamos ver el siguiente vídeo:
Se trata de una patología curable, sin embargo, el pronóstico en cada caso es variable y difícil de predecir. En el caso que el factor causal sea por sobreesfuerzo de la cadera, la trocanteritis se cura por completo después de unos días o semanas, mediante el tratamiento conservador compuesto por el reposo de la articulación y la fisioterapia.
Si la inflamación aparece después de una operación o si hay sospecha de una causa sistémica, el pronóstico de curación es más largo. Así como también, si el paciente no ha sido constante con la terapia o tiene una diagnóstico y tratamiento tardío. En estos casos, se puede desarrollar inflamación crónica, que suele ser frecuentemente resuelta con cirugía. La cirugía podría implicar complicaciones como daño nervioso, infecciones o movimiento restringido de la articulación afectada. Por ello es importante verificar si la cirugía ayudaría en su caso y agotar todos los tratamientos conservadores disponibles.