En este vídeo se explicará los procesos que se dan en la recuperación de la rotura de fibras y la explicación, por lo tanto, de los diferentes actos terapéuticos que vamos a realizar en, el tratamiento o auto-tratamiento, de las lesiones musculares
Para empezar vamos a ver cómo una rotura de fibras se da en el espesor de un vientre muscular. Estas roturas pueden ser de tamaño variable, puede ser una micro-rotura o hasta grande roturas musculares.
En una rotura de fibras(1) hay solución de continuidad de las estructuras que forman el músculo, es decir, las fibras musculares se rompen.
La rotura de fibras puede ser total, el músculo se va a romper vientre muscular por completo, o parcial, se va romper un grupo de fibras o fascículos, también existen las microrroturas, pero que apenas presentan clínica.
En el siguiente vídeo veremos todo lo relacionado con las roturas musculares, desgarros musculares o roturas fibrilares. Esta lesión es bastante común en el mundo deportivo, pero no significa que sea exclusiva para deportistas, una persona no deportista también puede sufrir de un desgarro si las condiciones se presentan.
Cuando ocurre un desgarro se siente un dolor brusco e intenso en el músculo y hay una limitación funcional inmediata. Si ocurre en un deportista el médico pedirá la realización de una ecografía o una resonancia para saber el grado de la lesión y su posible tiempo de recuperación. Para su tratamiento normalmente es suficiente realizar fisioterapia.
La rotura de fibras es común en los deportes durante gestos explosivos(2), cambios de velocidad y cambios de ritmo, o en todas aquellas actividades done hay contracciones violentas de la musculatura, o movimientos de grandes amplitudes que generan una elongación rápida del músculo la cual no es capaz de soportar y ocurre la rotura ésta es una de las causas principales.
Los músculos donde generalmente se produce la rotura de fibras son aquellos en los que dentro de sus características carecen de flexibilidad como el Gemelo y Sóleo, los Isquiotibiales, el Recto Anterior del Cuádriceps y el grupo aductor, a continuación puedes ver otras causas.
La falta de calentamiento, que provoca que el sistema que gestiona neurológicamente los acortamientos y los alargamientos del músculo, en el ejercicio esté todavía sin su correcta velocidad y eso puede facilitar una lesión muscular.
Te recomendamos nuestro artículo sobre: Tratamiento y recuperación de un desgarro muscular o rotura de fibras.
- Un acortamiento de la musculatura, en una persona con músculos muy rígidos, va a tener más probabilidades de tener una rotura de fibras.
- La fatiga psicofísica, es decir, una persona que está cansada en líneas generales o ya lleva mucho tiempo haciendo una actividad física de forma continuada.
- Tenemos un movimiento excesivo, por una mala suerte, por un resbalón, por un mal gesto, ya hace que un músculo se estire más que lo debido.
- Tendríamos también el golpe directo fortuito, el clásico golpe rodillazo en el muslo que provoca también la rotura de fibras musculares de diferentes características.
- Las fibras son todas longitudinales y siguen la misma dirección y en el lugar en donde se ha hecho una rotura de fibras con sangrado y un hematoma tenemos una discontinuidad.
- Dolor: la persona va a sentir dolor en forma de pinchazo que va a ser más intenso cuanto mayor sea la rotura de fibras, en los casos de microroturas o roturas parciales el pinchazo solo va a sentirse en los casos de contracciones intensas.
- Deformación, va a ser más evidente en los casos de rotura de fibras completa, en los casos de rotura parcial vamos a notar una hendidura al tacto, especialmente al llevar al músculo al punto de estiramiento en el que comienza a doler.
- Dolor al estiramiento: Especialmente en la rotura de fibras parciales.
- Depresión o hundimiento. Se realiza un estiramiento pasivo hasta que la persona dice sentir dolor, entonces palpamos y notaremos una depresión o hundimiento.
- Hematoma: La rotura de fibras va a generar un hematoma o moretón que a causa de la gravedad se va a hacer evidente más abajo de la rotura fibrilar.
La rotura de fibras las podemos clasificar en tres fases(3), a continuación explicó cada una de ellas y su tratamiento específico.
Más aguda, se da en la primera hora o primero día de la lesión. Inicialmente se da un sangrado, aunque es importante decir que en algunos casos no se da este sangrado. Este sangrado va a dar lugar a sustancia de deshecho: células muertas, sangre, que van a provocar una inflamación.
Todas estas sustancias son las que van a dar lugar a que se desencadene los procesos inflamatorios y por lo tanto el dolor. Y va a darse más un proceso que se conoce como “muerte isquémica secundaria” que sucede en todas las lesiones dado que la propia inflamación y la disminución de ritmo sanguíneo que produce la zona, esta inflamación y esta acumulación de líquidos, va a provocar que haya tejidos que estén pocos vascularizados y vayan muriendo más células como si se hicieran una onda expansiva a lo largo del tiempo, van muriendo más células por falta oxigenación.
Esto es un proceso limitado en el tiempo, se da en las horas siguientes a la lesión y que va a ser especialmente importante que tengamos en cuenta los primeros puntos del tratamiento de cualquier rotura de fibras:
- El hielo, que va a disminuir la necesidad de oxígeno de los tejidos y va a disminuir esta muerte isquémica secundaria.
- La compresión, apretar el músculo, para evitar que la inflamación sea más grande.
- El reposo para no forzar la lesión.
- Un masaje drenante, que nos ayude a eliminar, a vaciar el sangrado, eliminar los líquidos que ya se van acumular rápidamente en torno a la lesión.
- Y esa misma noche, podemos ponernos la primera sesión de arcilla roja.
Es aquella en la que el cuerpo está haciendo principalmente labores de limpieza de residuos; se está dando un inicio de la cicatrización, una especie de cicatriz más blanda, más cerca de lo gelatinoso; y un restablecimiento de la circulación sanguínea, como proceso inicial, previo, a la reconstrucción de los tejidos.
Primero se trata de limpiar, de restablecer el funcionamiento, para posteriormente iniciar la reconstrucción. Tratamiento en esta fase:
- La arcilla roja que nos va a ayudar en la limpieza de los tejidos.
- Vamos a perseverar en el masaje drenante, que puede ser algo más intenso; un masaje transverso que sería un paso más allá que el masaje de drenante, que va a profundizar un poco más para evacuar el sangrado y además va a ayudar a que las fibras que ya inicialmente se están formándose, se formen en la dirección correcta, que es una de las características que tiene el masaje transverso.
- Vamos a realizar estiramientos suave.
- Realización de movimientos suaves, ambas dos, van a informar a los tejidos que ya están comenzando a la reorganización de la lesión, de la rotura de fibras, vamos a darle información de qué dirección tiene que llevar las nuevas fibras que están empezando en este momento a formarse.
Es la última fase. La cicatriz suele ser menos ordenada, más caótica, no con la dirección longitudinal que precisa un músculo para quedar fuerte y tener menor riesgos de repetir las roturas de fibras. En un primer momento se da una cicatrización, y luego, poco a poco, el cuerpo va remodelando dentro de las posibilidades, y va haciendo que la cicatriz sea lo más fina y lo más correcta posible.
Cuanto más normal y más cercano a la normalidad haya sido el proceso de cicatrización, menor recorrido tendrá el proceso de remodelación y más profundo podrá ser llegando a una situación en la que el músculo sea prácticamente como el original.
Y por último, tendríamos la integración de ese resultado final, en el patrón de movimiento y en el patrón propio efectivo y de gestión neurológica del cuerpo, ya que la situación resultante del músculo no va a ser igual a la previa a la lesión, y esta nueva realidad tendrá que integrarse en el nuevo esquema. En esta fase va a ser extremadamente importante:
- El masaje transverso profundo, que va a ayudar especialmente a que esa cicatrización y la remodelación sean más profundas y más perfectas.
- El estiramiento.
- Los isométricos excentricos.
- Y la actividad física y movimiento que van ayudar, por un lado, a informar al cuerpo en qué dirección tienen que formarse las fibras; y por otro lado, y va a ayudar que el proceso de remodelación sea mucho más profundo, y el movimiento y la actividad son lo básico para la integración. Todo eso nos van ayudar que el músculo resultante de la cicatrización, que no es exactamente igual que el anterior, se reintegre nuevamente en el patrón de motricidad.
- Masaje de evacuación: En un primer momento se genera hematoma, se hace visible por debajo de la rotura, pero que a nivel muscular está situado entre las fibras, dificultando su unión y cicatrización, por ello realizamos este masaje de vaciado.
- Masaje de puenteo: con ello intentamos aproximar los extremos de las fibras que se han roto y también orientar correctamente las fibras nuevas que se forman.
- Masaje de descarga: nunca lo realizaremos sobre la rotura, lo vamos a realizar sobre las fibras para mejorar la situación del músculo.
- Cyriax: lo podemos realizar en los últimos estadíos del tratamiento para mejorar la cicatriz, reorientar sus fibras.
- Propiocepción: con el fin de evitar nuevas lesiones y mejorar la funcionalidad.
(1)http://www.scielo.br/scielo.php?pid=S0102-36162011000400002&script=sci_arttext&tlng=en
(2)https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S2255497115301907
(3)https://bjsm.bmj.com/content/47/6/342