Las lesiones nerviosas periféricas suelen afectar la sensibilidad de la zona lesionada, por lo general estas lesiones son de origen traumático, repercutiendo en la acción sensoriomotriz de estos nervios.
"Es un tumor benigno, quiste o granuloma más o menos voluminoso que afecta un nervio."
¿Por qué se produce un neuroma?
Los neuromas pueden estar causados por presiones continuas sobre el nervio, bien sea por traumatismo directos en la zona del nervio o por el uso de zapatos con tacón o el apoyo incorrecto del pie al caminar (en el caso del neuroma de morton).
¿Qué estructuras afecta el neuroma?
Generalmente la estructura con mayor prevalencia de afección por un neuroma es el pie (neuroma de morton), específicamente en los nervios que se encuentran entre los dedos del pie, comúnmente entre el tercer y cuarto dedo.
Pero al ser una afección nerviosa puede presentarse en otras zonas del cuerpo como la mano.
¿Cuáles son los síntomas de un neuroma?
El principal síntoma que refiere el paciente es el dolor intenso e irradiado a las zonas adyacentes a donde se encuentra el tumor o quiste, es decir que si se encuentra en el pie el dolor se irradia a los dedos. El dolor suele mitigarse durante la noche en periodo de reposo.
También se acompaña por pérdida de la sensibilidad, sensación de hormigueo y presencia de espasmos musculares.
Normalmente no se visualizan signos externos como inflamación o protuberancia.
"El principal síntoma que refiere el paciente es el dolor intenso."
¿Cuál es el tratamiento del neuroma?
Mayormente el tratamiento del neuroma en conservador para ello se utilizan órtesis para evitar la sobrecarga y compresión nerviosa, en el caso del neuroma de morton se utilizan plantillas (órtesis plantar).
La fisioterapia es otra alternativa de tratamiento conservador a utilizar, con el objetivo de disminuir la inflamación de la zona, para ello se utilizan técnicas y métodos como la radiofrecuencia, la electroterapia, crioterapia, estiramientos y el masaje terapéutico.
También se suelen utilizar infiltraciones con corticoesteroides y analgésicos para ayudar en el proceso de desinflamación.
En última instancia se recurre a la cirugía, cuando los tratamientos conservadores no han funcionado en el paciente.