Las partes más distales de las piernas, que son el tobillo y el pie, son dos regiones que están conformadas por múltiples articulaciones. Pero para que esas uniones puedan establecerse se necesita la presencia de varios ligamentos.
Ahora bien, uno de estos tejidos conectivos es el ligamento lateral externo con sus tres fascículos: peroneoastragalino anterior y posterior, y el peroneocalcáneo.
"Estos fascículos nacen del maléolo peroneo y terminan en la parte posterior del pie"
¿Cuáles son los ligamentos peroneoastragalino?
Los ligamentos peroneoastragalinos son dos fascículos del tobillo, que son conocidos en anatomía como fascículo anterior y posterior. Y los cuales son importantes para evitar los movimientos excesivos de la articulación, es decir que evitan lesiones.
¿Dónde está ubicado el ligamento peroneoastragalino?
Ambos ligamentos están localizados en la parte distal de ambas piernas, en una región que es conocida como el maléolo peroneo o externo. La diferencia es que ambos se insertan en diferentes caras del hueso astrágalo.
"Son dos tejidos resistentes que evitan que el tobillo pierda inestabilidad"
¿Dónde se origina e inserta el ligamento peroneoastragalino?
Mientras el ligamento peroneoastragalino anterior es pequeño y nace de la región anterior del maléolo externo, el ligamento posterior se origina en el mismo hueso, pero por el borde opuesto. En cuanto, a la inserción los dos llegan al astrágalo que forma parte de los huesos del tarso, pero uno llega a la parte externa y el otro a la zona posterior.
Es decir, que ambos se originan en la parte distal del peroné, que es conocido como el maléolo externo, y se insertan en el astrágalo que es uno de los huesos del retropié.
¿Qué lesiones afectan al ligamento peroneoastragalino?
El esguince es una lesión que afecta directamente a los ligamentos, y en el caso del tobillo esta es una de las lesiones que más se producen. El esguince además de producir distensión del ligamento lateral externo, también genera dolor, edema, dificultad para mover el tobillo, inestabilidad articular e incapacidad para colocar el peso del cuerpo sobre el pie.
Por tal razón, podemos encontrar que la persona comienza a presentar cambios en las actividades de la vida diaria, lo que conlleva a limitaciones. Entonces, para poder aliviar el dolor y todos los demás síntomas es necesario que se realice un tratamiento de rehabilitación.
Pero para poder realizar el tratamiento, primero se deben hacer evaluaciones con el fin de determinar el grado del esguince, ya que si existe rotura completa de las fibras puede ser necesaria la aplicación de una cirugía para reparar el tejido afectado.
"Los esguinces son productos de caídas y traumatismos, en los cuales se realiza un movimiento inversión excesiva del tobillo"
En cuanto a las causas de los esguinces podemos encontrar que las caídas y los traumatismos que involucren al pie y el tobillo, pueden terminar produciendo una lesión en los ligamentos.
En cualquier caso, es importante que el paciente asista al médico y que posteriormente siga las recomendaciones del terapeuta con respecto a los ejercicios más idóneos para lograr la recuperación.
Otro factor a tener en cuenta por el paciente, es que la lesión que involucra rotura de las fibras, va a necesitar un tratamiento más prolongado, ya que posiblemente se necesita una cirugía. Además estos son tejidos que si no son fortalecidos correctamente, pueden producir recidivas.
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