La artritis y la artrosis se refieren a la inflamación y degeneración de la articulación y el cartílago articular pero ¿qué es este cartílago?

La artritis y la artrosis son 2 enfermedades que afectan al cartílago articular pero, ¿conoces la diferencia entre ellas?

Cartílago articular: estructura fundamental para los movimientos 

El cartílago articular es un tejido elástico, que está dotado de una notable resistencia a la presión y de tracción. Tiene un color blanco perlado y cubre los extremos de los huesos, articulaciones protegiéndolas de fricción. Está compuesto, valga la redundancia, por fibras de colágeno (en un 60 o 70%) que le da su resistencia y células llamadas condrocitos, que producen unas sustancias que se alojan entre las fibras de colágeno y retienen agua (que le da la propiedad al cartílago de ser viscoso y resistente a las fricciones).

La función del cartílago articular es:

• Aumentar la congruencia entre las articulaciones
• Amortiguar la sobrecarga de las superficies articulares que están en contacto
• Permitir el desplazamiento de las superficies óseas durante el movimiento

El cartílago tiene una particularidad: no recibe irrigación sanguínea ni linfática ni tiene estructuras nerviosas que lo inerven. El cartílago recibe su alimentación y nutrición a través del líquido sinovial, líquido que produce la membrana sinovial de la cápsula articular (la cápsula articular es una estructura que recubre y encierra la articulación). Al no recibir inervación el cartílago no duele. Cuando se produce un dolor es porque proviene de las demás estructuras de la articulación: ligamentos, tendones, cápsula articular… Las estructuras que sí están inervadas.

¿Qué sucede con la artritis? 

La artritis es una palabra que proviene del griego arthron que significa coyuntura y el sufijo “-itis” que significa inflamación, por lo que la artritis es la inflamación de las coyunturas o articulaciones. El cartílago permite que las articulaciones se muevan suavemente, además de absorber los impactos que tienen que soportar las articulaciones (por supuesto esto del impacto sucede más en unas articulaciones más que en otras). Con las inflamaciones el cartílago pierde propiedades y sin el cartílago los huesos chocan unos con otros provocando mucho dolor y discapacidad.

Uno de los aspectos positivos en cuanto a la artritis es que apenas se recibe el tratamiento se resuelven los síntomas; la artritis entonces es reversible.

¿Qué sucede con la artrosis? 

La artrosis es una enfermedad crónica, es decir, que se padece a lo largo de mucho tiempo. En la artrosis se va destruyendo poco a poco el cartílago articular. La artrosis, al igual que la artritis produce dolor y discapacidad, pero como ves lo hace a través de un mecanismo diferente.

¿Por qué se tienden a confundir la artritis y la artrosis? ¿En qué se diferencian? 

La artritis y la artrosis tienen similitudes que hacen que nos confundamos entre ellas: ambas producen disminución de las amplitudes de movimiento articulares, rigidez y dolor. Pero en realidad son muy diferentes una de la otra:

• La artritis es producida por causas variadas como infecciones o traumatismos, en cambio la artrosis se produce por la edad y el desgaste del cartílago.
• La artritis desaparece cuando se trata la causa, en cambio la artrosis no.
• La artrosis es progresiva, empeora con el tiempo.

Sin embargo, tanto en la artritis como en la artrosis es importante el ejercicio físico regular, adaptado a las necesidades de la patología y los gustos de la persona que la padece. El ejercicio debe de ser prescrito por especialistas: los fisioterapeutas. La actividad física, tanto en la artritis como en la artrosis, ayudan a retrasar el envejecimiento del cartílago y el dolor de las articulaciones, aumentar la fuerza muscular, mejorar el rango de movilidad de las articulaciones y genera sensación de bienestar.