La cintura pélvica es la región del cuerpo que tiene la función de unir las extremidades inferiores con el tronco. Esta zona está formada por el hueso coxal con sus tres partes correspondientes (isquion, ilion y pubis), el sacro y el cóccix.
"El isquion es una estructura que pertenece a la anatomía de la pelvis"
De acuerdo a la anatomía, el isquion tiene una rama descendente que se encarga de mantener alejadas a la zona cotiloidea de la escotadura isquiopubiana; y una rama ascendente que se fusiona con el pubis. Así mismo, tiene un área conocida como tuberosidad isquiática que sirve de inserción para algunos músculos.
¿Qué significa la palabra isquion ?
El origen etimológico de la palabra isquion se remonta a la época antigua, cuando los griegos utilizaron este término para designar a la estructura ósea que forma parte de la articulación coxofemoral.
¿Dónde está el isquion?
Se encuentra en la región de la cadera, específicamente en la zona inferior y más externa del ilíaco, por lo cual presenta relación con las otras dos porciones, denominadas pubis e ilion.
¿Para qué sirve el isquion?
Además, de ser importante por pertenecer a la anatomía de la cintura pélvica, también es una de los huesos que sirve como punto de inserción para los músculos pectíneo, aductor medio, aductor menor, grácil, isquiotibiales, obturador externo, cuadrado crural y para el aductor mayor.
"Esta formado por 2 ramas y una tuberosidad isquiática, en las cuales se insertan varios músculos importantes"
¿Por qué duelen los isquiones?
Las causas que producen dolor en esta región del cuerpo son muchas, pero entre ellas podemos destacar el pinzamiento isquiofemoral, las irritaciones en el nervio ciático a la altura del glúteo, fracturas, osteoporosis y las lesiones repetitivas en los músculos y tendones que se insertan en la tuberosidad isquiática o en cualquieras de sus otras partes.
En el caso del pinzamiento, este se produce por un contacto excesivo entre el isquion y el fémur en el cual se disminuye el espacio fisiológico entre ambas superficies; las lesiones de músculos y nervios pueden ser producto de movimientos continuos y posturas mantenidas en el tiempo, como ocurre cuando se pasa mucho tiempo en sedente; y las fracturas si se deben a traumatismos y caídas.
En cualquiera de ellos, lo primero que se puede presentar como característica clínica es el dolor, acompañado de molestias e incomodidad para sentarse debido al contacto que se produce entre los huesos con las estructuras más blandas.
Ahora bien, de forma general es recomendable que al experimentar síntomas como los mencionados, la persona asista a consulta con un médico para que se pueda determinar cuales estructuras anatómicas están afectadas.