En contraste con la lumbalgia o la cervicalgia, la dorsalgia rara vez es causada por cambios patológicos en los discos intervertebrales. La razón es que, en la parte media de la espalda, la espina tiene poca movilidad. Sin embargo, la relativa rigidez de la columna torácica también significa que una postura forzada e incorrecta puede conducir rápidamente al dolor por el exceso de trabajo en la zona. La mala postura, por tanto, es una de las causas de dorsalgia, conoce cuales otras hay y obtén mayor información sobre esta afección en el siguiente artículo:
El origen etimológico del término dorsalgia radica en la unión de dos palabras, una proveniente del latín “dorsum” que significa espalda y la otra de origen griego “algos” que significa dolor, las cuales enlazadas hacen referencia al dolor de espalda. Este término en el ámbito médico es usado para indicar la presencia de dolor en la columna dorsal.
La columna dorsal, también llamada torácica es la segunda sección de la columna vertebral y se encuentra entre la cervical y lumbar. Comienza después de la séptima vértebra cervical que se une con la primera de un total de doce vértebras torácicas (T1-T12). Después de la 12a vértebra torácica comienza la zona lumbar.
Los procesos espinosos de las vértebras se encuentran uno encima del otro debajo de la piel de la espalda media; en personas delgadas estos son visibles y palpables fácilmente.
Las vértebras torácicas son más fuertes que las vértebras cervicales y se vuelven más fuertes y más estables mientras más abajo están, debido a la creciente carga corporal que descansa sobre ellas.
Vistas de lado, las vértebras torácicas superiores e inferiores tienen un diámetro mayor que las del medio.
Los cuerpos vertebrales son ligeramente más altos en la parte delantera que en la parte posterior y la superficie frontal que mira hacia el pecho está ligeramente ahuecada.
A diferencia de la zona cervical y lumbar, la región dorsal de la espina se articula lateralmente con otras estructuras óseas: las costillas.
Estas articulaciones llamadas costovertebrales permiten que el tórax se mueva en cada respiración y contribuye a la protección de importantes órganos (pulmones, corazón).
La espina dorsal está protegida por variedad de músculos, los cuáles son los culpables de la dorsalgia en la mayoría de los casos. Ya que estos músculos por diversos factores están propensos a sufrir de contracturas musculares. En la siguiente infografía podrás observar los músculos más destacables de la media espalda (romboides, músculos espinales dorsales, angular de la escápula, trapecios):
Podemos clasificar al dolor dorsal según la duración del dolor y su etiología, siendo estas las siguientes:
La prevalencia de la dorsalgia hoy en día ha estado en aumento por la variedad de malas posturas que adoptamos en el día a día. En cuanto a la duración del dolor de esta afección la misma oscila entre 4.0-72.0% (en cualquier momento), 0.5-51.4% (7 días), 1.4-34.8% (1 mes), 4.8-7.0% (3 meses), 3.5-34.8% (1 año) y 15.6-19.5% (de por vida). Este tipo de algias afecta más frecuentemente a niños y adolescentes del género femenino.
El #dolor de espalda es un síntoma frecuente entre la población general q ocupa gran parte de las consultas de #AtenciónPrimaria y de las #urgencias, siendo la #dorsalgia menos frecuente que los dolores referidos a la columna lumbar y cervical Rt @SEMG_ES https://t.co/62k5YQezYF
— Dra. Maria Madariaga #QuedateEnCasa (@DraMadariaga) July 25, 2018
El dolor en la zona media de la espalda es el síntoma característico de la dorsalgia, sin embargo, son variados los síntomas que acompañan ésta lesión y los mismos van a depender del origen desencadenante. Los síntomas que podemos destacar en caso de una Dorsalgia son:
Algunos síntomas hacen sospechar la presencia de algunas alteraciones o enfermedades específicas más graves que una afección muscular. A continuación, describimos las más destacables:
Los cambios congénitos y adquiridos son factores causales de la dorsalgia, por ejemplo, en la llamada escoliosis idiopática, la columna está curvada lateralmente y las vértebras torácicas están retorcidas sobre su eje longitudinal lo que puede ser causante de dolor. De los factores adquiridos podemos destacar las alteraciones posturales, ya que estas consisten en desbalances musculares que conducen a la aparición de dolor.
La lesión más frecuente en la espina es la hernia de disco, sin embargo, ocurre con menos frecuencia en la región torácica en contraste con la cervical y la lumbar. Esta lesión discal puede conducir a la compresión de la médula espinal y los nervios espinales, lo que consecuentemente puede ocasionar dolor dorsal. En ocasiones, el dolor se debe a bloqueos en las vértebras torácicas influenciadas por contracturas o desbalances musculares.
Otras causas asociadas
Este tipo de algia es prevenible, ya que en la mayoría de los casos se origina por cambios degenerativos promovidos por alteraciones posturales. Teniendo esto en claro, las medidas enfocadas en la prevención del dolor en medio de la espalda son las siguientes:
Dado que existen diferentes causas para el desarrollo de esta afección, un cuidadoso historial médico (anamnesis) es n primer paso esencial. La entrevista va enfocada inicialmente en la profesión del paciente. Al conocer la profesión, ya se pueden identificar posibles factores causales que correspondan, además según los síntomas y las molestias que te esté refiriendo el paciente también es posible inferir el origen de la dorsalgia.
Seguidamente, el médico o fisioterapeuta procede a realizar un examen físico a profundidad que involucre valoración de la amplitud articular, palpación, valoración sensitiva y neurológica. Con los resultados del examen clínico es posible obtener un diagnóstico probable, sin embargo, para obtener uno certero es necesario realizar estudios de imagen como las radiografías, que permiten evidenciar el estado de las estructuras óseas.
Por otro lado, la tomografía computarizada y la resonancia magnética también permite detectar si el origen del dolor en proveniente de un tejido blando como una herniación. Debido a los diferentes procedimientos de diagnóstico, el especialista puede y debe extraer información extensa porque con ello es posible establecer las medidas terapéuticas a tomar para solucionarlo.
El objetivo principal del tratamiento médico es solucionar las causas que conllevaron al dolor dorsal, primeramente, a través de la indicación de medicamentos analgésicos, relajantes musculares y antiinflamatorios cuyo objetivo es reducir la tensión ejercida por los músculos dorsales. En caso de que el abordaje terapéutico no surta el efecto deseado en la reducción de los síntomas, el siguiente paso es más invasivo y trata de inyecciones de anestésicos locales mediante terapia neural, las cuales aplicadas en el lugar correcto produce un alivio de la dorsalgia casi inmediato. Sin embargo, el efecto analgésico obtenido suele ser transitorio.
En caso de que el abordaje terapéutico no surta el efecto deseado en la reducción de los síntomas, el siguiente paso es más invasivo: inyecciones o cirugía.
La cirugía se convierte en opción si se ha identificado una causa clara que posiblemente pueda remediarse con una intervención quirúrgica. Por ejemplo, la cirugía puede ser una opción si el disco intervertebral está presionando un nervio. Sin embargo, este tipo de intervenciones en la columna dorsal puede conllevar notables riesgos. Por lo tanto, es importante sopesar cuidadosamente las ventajas y desventajas de la operación.
La fisioterapia a menudo se prescribe para solucionar la dorsalgia, porque se ha demostrado que puede apoyar y aliviar la columna de manera óptima. El objetivo principal a obtener desde la fisioterapia es la analgesia de los dolores, para ello se disponen de variedad de técnicas pasivas y activas.
Otros objetivos importantes también para cumplir son el fortalecimiento de la musculatura dorsal, el aumento de la amplitud articular de la columna, la reducción del estrés, obtención de una correcta postura corporal y el retorno funcional a las actividades de la vida diaria. Teniendo esto en claro, las intervenciones fisioterapéuticas enfocadas en la recuperación del paciente con dorsalgia son:
El tratamiento está diseñado desde la visión Fiit Concept – Fisioterapia Integrativa, la cual tiene sus principios anclados en la filosofía de la Medicina Tradicional China (Medicina Oriental), la cual afirma que las emociones pueden repercutir en el funcionamiento de órganos y vísceras, lo que conlleva a la aparición de alteraciones musculares y articulares, debido a la conexión existente formada por el sistema nervioso simpático y parasimpático. Pero esta filosofía no sólo afirma que las emociones pueden provocar una disfunción visceral, sino que existen otras que también pueden provocarla como las alteraciones nutricionales y el mal manejo del estrés que finalmente genere alteraciones en el sistema musculoesquelético como aumento del tono, rigidez y bloqueos intervertebrales.
Toda esta relación la podrás ver ejemplificada en el siguiente diagrama:
Una vez aclarado esto, podemos afirmar que la dorsalgia no sólo se origina por factores físicos o mecánicos (las malas posturas, trabajos repetitivos, exceso de ejercicio y sedentarismo) nombrados en este artículo, sino que también pueden ocasionarlo la presencia de una disfunción visceral relacionada al estrés, alteraciones nutricionales y emocionales.
La dorsalgia desde nuestra visión Fiit Concept – Fisioterapia Integrativa, tiene una relación muy fuerte con la disfunción visceral, se origina como consecuencia de una disfunción visceral del estómago, hígado y la vesícula biliar, estos órganos pueden ocasionar cambios en la biomecánica de la región interescapular dorsal.
Ahora bien, la aparición de dorsalgia que predomina en el lado derecho es promovida específicamente por disfunciones en el hígado. Mientras que la que se orientan hacia el lado izquierdo son asociadas a disfunciones en el estómago. Ambas disfunciones conducen a bloqueos vertebrales a nivel dorsal que producen dolor y rigidez, además estos órganos pueden tensar la musculatura de la región dorsal, promoviendo la compresión de las articulaciones intervertebrales dorsales. Estas disfunciones pueden originarse por variados factores que a continuación te explicaré:
Estos tres factores cada uno por su lado o en conjunto ocasiona alteraciones en el sistema musculoesquelético, originando rigidez en la región dorsal y bloqueos en las articulaciones dorsales, así como también desequilibrio en los músculos intervertebrales que por ende ocasiona la instauración de una dorsalgia.
En nuestro portal de YouTube FisioOnline añadimos vídeos con recomendaciones terapéuticas para tratar las principales patologías, dolores y disfunciones que desmejoran la calidad de vida de nuestros pacientes. En caso de presentar dorsalgia te recomendamos ver los siguientes vídeos:
Primeramente, te dejamos en el siguiente vídeo, importante información basada en la fisioterapia, que te ayudará a reducir los síntomas de este tipo de algia tan común. Aprende a cómo realizar ejercicios, estiramientos y masajes en la zona dorsal a continuación.
Cómo ya hemos destacado en la información de este artículo, existen tratamientos naturales enfocados en la solución de las causas para eliminar eficazmente los síntomas. En el siguiente vídeo aprenderás como tratar adecuadamente el dolor dorsal hacia el lado izquierdo:
La dorsalgia también se presenta en el lado derecha, si este es tu caso, logra aliviarla con el tratamiento que se presenta en el vídeo a continuación:
El Pilates es una excelente disciplina, que no sólo sirve como método de entrenamiento sino también como método terapéutico, aprende algunos ejercicios que no sólo te ayudarán a obtener analgesia sino también que evitará que la dorsalgia vuelva:
El pronóstico está directamente relacionado con la causa del dolor de espalda, si su origen radica en disfunciones miofasciales producto de la malas posturas y estrés, su pronóstico suele ser favorable si toman las medidas terapéuticas y los cambios permanentes que sean necesarios en el estilo de vida.
El pronóstico está directamente relacionado con la causa del dolor de espalda.
Sin embargo, en el caso que las causas sean enfermedades o lesiones estructurales, afecciones neurológicas o reumáticas, el proceso de curación puede ser un poco tardío, mientras que se resuelve la patología causante. Muchos casos de dolor de espalda torácico inespecífico se resuelven en unas pocas semanas.