En los órganos como el corazón, hígado y los pulmones se localizan una serie de células específicas que le proporcionan a cada uno de los tejidos la capacidad de ejecutar todas las funciones para los que fueron diseñados. Por eso son componentes importantes para el funcionamiento adecuado de la respiración, circulación y la eliminación de sustancias que se derivan de otros procesos celulares.
"La célula hepática se localiza únicamente en el hígado"
Otras células del cuerpo que valen la pena recalcar son los neumocitos, adipocitos y los sinoviocitos.
¿Dónde se encuentran los hepatocitos?
Estas células se localizan en el hígado en lo que se conoce como tejido hepático, y en comparación con otras sustancias de la zona se encuentra con mayor proporción, por lo que es importante para la eliminación de productos de desecho que se originan en el mismo cuerpo.
¿Cómo se forman los hepatocitos?
La producción de la primera célula hepatocito comienza en la gestación aproximadamente al 6to mes de la concepción, cuando el hepatoblasto (célula principal) se diferencia y da origen a estas unidades funcionales del hígado.
¿Qué tejidos forman los hepatocitos?
Cada hepatocito contribuye de manera activa a la formación del tejido hepático que solo pertenece al hígado, por eso son los responsables de cualquier daño en el órgano. Y esto solo es posible gracias a que el hepatocito está formado de las estructuras típicas que componen a la célula común, las cuales se mencionan a continuación:
- Tienen citoplasma, nucléolo, membrana plasmática, retículo y aparato de Golgi.
- Además, en su interior contiene glucógeno que es un tipo de estructura parecido a la glucosa.
¿Qué función cumplen los hepatocitos?
Las células hepáticas cumplen funciones importantes para la síntesis de sustancias nutritivas, como las proteínas, y también tienen tareas relacionadas con la descomposición de los carbohidratos y lípidos.
"Es la encargada de producir la bilis que participa en la descomposición y obtención de nutrientes"
Así mismo, son las únicas capaces de producir bilis que luego será transportada a los conductos biliares; eliminar desechos de los medicamentos consumidos e intervienen luego del proceso de la respiración celular para obtener energía que posteriormente funcione para llevar a cabo las funciones vitales.
