Los músculos son tejidos que se sitúan en la toda la periferia y en la parte central del cuerpo con el objetivo de ser una protección para los órganos más internos y además son los encargados de crear los movimientos necesarios para que podamos realizar todas las actividades de la vida diaria. Por eso cuando se presentan enfermedades o lesiones que afectan a las células musculares, aparecen síntomas y signos característicos.
"La atrofia muscular es un signo de daño que se puede clasificar en varios tipos dependiendo del motivo que la desencadenó"
¿Cómo se identifica la atrofia?
La atrofia se puede identificar en las personas debido a que se presentan características notorias en las extremidades y el tronco del paciente. Entre las cuales destacamos la pérdida de fuerza, dificultad para mover las articulaciones, disminución en la masa del músculo y limitaciones en las actividades de la vida diaria.
¿Por qué se atrofia un músculo?
Un músculo puede atrofiarse por múltiples motivos, por eso es que dependiendo de la etiología y en función de los síntomas asociados el tratamiento tendrá que ser diferente. Ahora bien, entre los desencadenantes podemos mencionar los siguientes:
- Enfermedades de los músculos como la distrofia.
- Cáncer.
- Patologías desmielinizantes.
- Períodos largos de inmovilización, por causas como las fracturas, esguinces o postoperatorios.
- Déficit nutricionales.
- Falta de ejercicios físicos.
- Lesiones de la médula espinal.
- Enfermedades crónicas, como los problemas cardíacos, del hígado y pulmonares.
¿Cómo se produce la atrofia muscular?
La atrofia muscular se produce en las personas como consecuencia de otras patologías cuando estas afectan al mecanismo de acción de los músculos. Entonces, lo que sucede es que estos tejidos no son capaces de absorber los nutrientes y además producen una aceleración en la eliminación de las proteínas necesarias para que se mantenga la masa muscular.
"Entre la causas de la atrofia podemos destacar el cáncer, lesiones medulares, fracturas, artrosis y sedentarismo"
¿Cuál es el tratamiento de la atrofia?
Dependiendo del tipo de atrofia y de la enfermedad que lo desencadenó se necesitará de un tratamiento en específico. Pero en general, la fisioterapia mediante intervenciones como la electroestimulación y los ejercicios terapéuticos se podrán lograr efectos positivos para el sistema muscular.
Además, los ejercicios de fortalecimiento y el uso de equipos como los ultrasonidos también puede contribuir a lograr beneficios en la salud del paciente.
